domingo, 2 de octubre de 2016

“Véndame los ojos”



 

-. “Extraña habitación, frutillas saboreo en mi boca pero no las veo…

Viertes champagne helado, sobre mis pechos y los lames a ritmo intenso…muerdes los pliegues de mis pezones…montañas de inmoralidad.

 

Bebes champagne y lo viertes en mi boca, desde TU boca…eso es tan sexy…

Todo huele rico, huele a jazmín…la flor de las geishas; haz cuidado cada detalle…como siempre…adoro los pétalos sobre la cama…las velas…la música…el ambiente perfecto, para un asesinato.

 

Que siento ahora?

 

Que es lo que tramas?

 

Cuál es el siguiente juego?

 

No veo nada, mis ojos están vendados…la vista me la has quitado…la has cubierto, con una venda negra, suave y aterciopelada…para que solo sea una experiencia, de sensaciones.

Dejo que me lleves a donde quieras

Dejo que me tomes como te plazca

Dejo que hagas lo que quieras con mi cuerpo

Dejo que me vendes los ojos, porque yo, me he enamorado de mi verdugo.

 

Juegas con mi boca, tu lengua lame mis labios y me vuelves loca, las yemas suaves de

tus dedos, juegan con mi clítoris y yo a ciegas, dejo que me sorprendas con tus tretas.

Chocolate líquido entra por mi boca, me besas y despacio me ahorcas…

 

Me enamoré de mi verdugo, me enamoré de ti…

Ahora te sorprendo yo a ti, saco un cuchillo enorme, que tenía guardado…y lo entierro con todas mis fuerzas, dentro de ti…me quito las vendas…y te beso con dolor y rabia, mientras mueres de apoco. Te amo, pero este amor enfermo y sicótico, no puede seguir más, y si no eres mío, no serás de ninguna otra.
 

Me miras aterrado, lloras…pero te sigues viendo hermoso, acaricio tu rostro. Yo lloro también, mientras no dejo de presionar el cuchillo contra ti…mi amado verdugo…te beso…te beso fuerte…y nos miramos a los ojos…no hay consuelo para tanto amor…no hay consuelo para tanto dolor.

Te abrazo, dejo que mueras sobre mí, me bañas en sangre…sangre que corre por la cama, como un río y se deja caer el piso…

Mueres…

…de apoco…

…mueres sobre mi…

Lloro desconsoladamente, con la punta de mis dedos, recojo parte de tu sangre, pinto mis labios con ella…mientras escucho, como el último suspiro sale de ti…

 


Dejé que me llevaras a donde querías

Dejé que me tomaras como te parecía

Dejé que hicieras lo que quisieras con mi cuerpo

Dejé que me vendaras los ojos, porque yo me enamoré de mi verdugo

 

Me he comido tu alma

 

¡ Me he comido tu amor a pedazos !

 

Escrito por: el gato nocturno

“Me haces tanto bien” – Amistades peligrosas